sábado, 6 de junio de 2009

ESPACIO HABITABLE, INTEGRADOR DE PODERES-coordinador:arq.Rolando Barahona-Sotela, Costa Rica







Arquitectura y comunicación.

Punto focal:
Los objetos habitables ya no son comunicativos, o sea, ya no ofrecen un trato sensible y accesible a la esencia humana.

Búsqueda:
El Taller Energía /Espacio busca despertar y encauzar la creatividad del estudiante hacia el campo de la sensibilidad espacial por medio de ejercicios de comunicación, o sea contacto con su esencia única y con sus propios sentimientos. Así, partiendo de esta base individual, cada participante va generando su estrategia para dotar con energía viva comunicante todo espacio que intente desarrollar, tanto a nivel teórico, como en un futuro cercano, a nivel práctico- en beneficio de su capacidad proyectual y de sus potenciales usuarios.

Se estimula al estudiante:1- como individuo independiente- único 2.- como componente de un grupo pensante y activo, hasta llegar a reconocer que lo óptimo en diseño espacial es lograr un aporte imaginativo capaz de transmitir un mensaje que satisfaga las necesidades humanas tanto físicas como espirituales, con un mínimo de elementos y un máximo de contenido. De aquí que una arquitectura para que sea viva, debe comunicar al usuario la energía que estimule sus órganos vitales y estimule en su mente las habilidad innata para interpretar y reaccionar a los datos sensoriales.

Objetivos vitales:

Al diseñar un espacio, se debe planificar nutrirlo de valores capaces de entablar un diálogo entre su contenido y el inconciente de quien lo habite, como un proceso retroalimentador de estímulo al instinto del ser humano por generar un nido como refugio para el descanso, la seguridad y la paz. LA META ES APRENDER A GENERAR una comunicación entre sentidos, cerebro y espacio que trascienda más allá de un simple acto estético de apreciación superficial.
Dicho espacio no puede ser solo un objeto mercantilista y superfluo, ya que en esencia lo óptimo es que llegue a convertirse en una madriguera protectora, un instrumento que documenta todas las vibraciones de la aventura humana, un escenario recolector de secretos, emociones, luchas, rivalidades, amor o desamor, lujuria o abandono, deseo reprimido y abrazo en la soledad.
Es importante reflexionar sobre el viejo refrán que reza ¡Si las paredes hablaran!.

Es fundamental que el profesional en proceso de aprendizaje, descubra por lo tanto, que estos sabios instrumentos que edificamos no pueden ser solo espacios fríamente calculados, técnicos y decorativos, porque la máquina de vivir no es un fin: es un todo integral útil en cuerpo y alma, como la piel, el corazón y la mente lo son para la vida.R.Barahona-Sotela 2002

Puntos a considerar:

No basta considerar una construcción como un ensamble de formas y colores. Es llegar a la función primera de habitar. Por ejemplo, después del útero, la cuna es nuestra primera comunicación con un rincón-objeto en un micro mundo que es la casa. Como la llama Bachelard en su libro la Poética del Espacio: el no yo que protege al yo. Debemos demostrar que la casa es unión de los mayores poderes de integración para los pensamientos, los recuerdos y los sueños del hombre…es el primer mundo del ser humano. Antes de ser lanzado al mundo, el hombre es depositado en la cuna de la casa…
Hoy día la edilicia es impersonal, una cavidad recargada de formas y decoraciones que al alejarse cada vez más de la espiritualidad innata del usuario, pierde su capacidad potencial de comunicación y crea ciudades convertidas en una colección de objetos con impacto visual dictados por una moda de añoranza en un pasado de otros pueblos.

Un espacio que sirva, proteja y estimule la armonía del habitante no se logra si inhibe a quien lo habita haciéndolo sentir como un intruso, como un mueble más.
Hemos olvidado que las entrañas de un aposento deben poseer la capacidad de comunicarse íntimamente con el usuario brindándole un abrazo que lo haga sentir protegido y libre. Es la adecuada respuesta a los fenómenos sociales, culturales y políticos, la que crea espacios amables. El ámbito vivencial no existe jamás aisladamente y está determinado por una relación: la comunicación íntima y sensual entre lo habitable y el habitante.
Preocupa un mundo en constante deformación que influye y arrastra al vacío los valores humanos y de la arquitectura, ya que hasta los gustos y las costumbres universalizadas, dependen de quienes dictan o poseen, sea poder, sea control de mensaje a las masas pasivas.

REFLEXIÓN:
El objeto espacio se ha vuelto un sistema mercantilista cuyo valor no está en función del bienestar del humano, sino en la competencia exhibicionista y lucha por el poder, con valores considerados capaces de impresionar visualmente.
El sistema contenido en una obra de LeCorbusier nos permite al ingresar, descubrir y sentir una serie de estados desconocidos, insospechados, que nos hace sentirnos amados al despertar nuestros sentidos.

Por el contrario, muchas casas y edificios, grandes o modestos, exhiben formas de culturas ajenas mal imitadas, pero todo en aras de la innovación que es distante y sentimentalista.
Hasta que punto la arquitectura, como diría Freud(1927) se ha vuelto fetichista, a la mirada- o sea, que lo que se percibe no corresponde a lo que está materialmente.

Conclusión y base de estudio:
Hacer arquitectura es arte y comunicación cuando se tiene la conciencia de que seres vivos la van a habitar y que su materialización se hace posible por medio del esfuerzo humano.

Tener la claridad de que cada diseñador, profesional o trabajador partícipe en el proceso, deja(aporta) parte de su energía hasta lograr concretar la materialización de una idea - la semilla inicial del proyecto.

Prácticas:
Durante el semestre los estudiantes participan activamente en ejercicios y repentinas tanto en el desarrollo de ponencias, investigaciones, ejercicios visuales, expresión corporal, simulacros de situaciones profesionales factibles y búsquedas en el mundo de la imaginación teniendo como base que esta no tiene límites ni prohibiciones.


LIBERTAD DE EXPRESIÓN INDIVIDUAL ESPONTÁNEA Y EXHAUSTIVA.
La experiencia al participar en el taller Energía/Espacio busca un volver a despertar el mundo sin límites de la infancia y la inocencia creativa, o sea descubrir el verdadero yo adormecido al igual que la espontaneidad- en ocasiones castrados-bloquedos por sistemas educativos durante la infancia .